La vocal de la Cámara 2ª del Crimen Mónica Traballini dictó en la tarde de este viernes la prisión preventiva del golfista Ángel Leopoldo “Pato” Cabrera (51) horas antes de que se produzca su llegada a Córdoba como extraditado por su rebeldía en la causa de violencia de género por la que debe ser juzgado a partir del 1 de julio.

La magistrada fundamentó cada uno de los puntos por los que considera que existe peligrosidad procesal para sostener su detención una vez que llegue a Córdoba y como una forma de asegurar, en prisión, que comparezca al juicio por dos causas de lesiones leves y hurto en perjuicio de su expareja Cecilia Torres Mana.

Traballini enumera los puntos de la rebeldía de Cabrera para someterse a proceso, desde que se fue del país sin avisar, permaneció en el extranjero sin regresar a pesar de ser declarado prófugo y dictarse orden de captura internacional. Además, la jueza considera los movimientos que realizó cuando ingresó subrepticiamente a Brasil y se mantuvo en secreto durante dos semanas, hasta que fue detenido. Se presume que la intención sería la de regresar a los Estados Unidos.

El análisis de la magistrada que lo juzgará en los primeros siete días de julio es pormenorizado y fundamenta los elementos para sostener la detención.

Entre otras consideraciones, la jueza infiere que Cabrera salió de Estados Unidos “temporariamente” porque se le vencía la visa el 12 de enero, con intenciones de reingresar porque en ese país no existe tratado de extradición.

La medida de la jueza se produce cuando, luego de retornar al país, el reo queda a su disposición y puede dictarle la prisión preventiva.

También esta resolución 85 se conoce horas después de que, en una entrevista realizada por Telenoche Doce, Cabrera se quejó porque habían creado un “monstruo” y anticipara que cuando regrese demostrará su inocencia.

Por otra parte, también se conoció que su abogado defensor Carlos Hairabedian declaró a la cadena nacional TN que su cliente tenía algunos problemas de salud. Algunos allegados a la causa interpretaron esta novedad como un indicio de un posible pedido de prisión domiciliaria.